Toluca, Méx. Francisco Javier Jiménez, fundador de un negocio local dedicado a la elaboración de pan con masa madre, elabora exclusivas roscas de reyes.
Este proyecto comenzó como un ejercicio escolar que se transformó en un emprendimiento exitoso que busca combinar sabor, tradición y salud.
La panadería lleva más de ocho años en operación y desde entonces utiliza masa madre para todos sus productos.
Este proceso implica una fermentación prolongada, entre 15 y 20 horas, esto para que el pan adquiera aroma y sabor, además de hacerlo más fácil de digerir.
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Consumir pan con masa madre no solo mejora la experiencia gastronómica, sino que también responde a una tendencia saludable, la fermentación prolongada ayuda a que el pan sea más nutritivo y menos pesado
Francisco Javier Jiménez
Las roscas se elaboran con un proceso que inicia a las 3 de la mañana, trabajando a temperatura ambiente para garantizar la calidad del producto.
Estas se destacan por sus sabores; naranja y guayaba, con adornos de chocolate y galletas.
Cada rosca se fermenta durante 12 a 18 horas y tiene un tamaño familiar, con capacidad para 8 a 10 porciones, incluyendo tres muñecos de barro artesanales, elaborados por una familia de Metepec, lo que añade un toque cultural a cada pieza.
El negocio ha encontrado un público entre mujeres jóvenes y adultas, quienes representan el 80% de sus clientes y se preocupan por la alimentación saludable de sus familias y de ellas mismas.
La pandemia impulsó la conciencia sobre la alimentación y eso nos benefició, ahora la gente busca opciones más saludables y está dispuesta a valorar el trabajo artesanal
Francisco Javier Jiménez
La venta de las roscas fermentadas comienza el 3 de enero y termina el 7 del mismo mes, la mayoría de los clientes llega directamente a la tienda.
Es una mezcla de harina y agua que ha sido fermentada por bacterias y levaduras naturales presentes en el ambiente.
A diferencia de la levadura comercial, que es un organismo único, la masa madre contiene una comunidad diversa de microorganismos que trabajan en conjunto para fermentar la masa y darle sabor y textura al pan.
La masa madre utiliza un proceso de fermentación natural para hacer que la masa de pan suba.
Durante la fermentación, las bacterias y levaduras presentes en la masa madre descomponen los azúcares presentes en la harina y producen dióxido de carbono y alcohol.
El dióxido de carbono atrapado en la masa hace que esta se expanda y le da al pan su característica textura esponjosa.
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