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San Mateo Atenco. Méx. Ana Muñiz Neyra, presidenta municipal de San Mateo Atenco, informó que, a inicios del 2025, comenzarán los recorridos con el gobierno federal y estatal en torno a las acciones de la primera etapa del plan de saneamiento y restauración ecológica del Río Lerma.
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En la parte del gobierno local que encabeza indicó que ha solicitado trabajar en la actualización de su Atlas de Inundaciones, que se concentra en la parte baja del municipio, y que tiene colindancia con el río.
Con ello, en este 2024, el municipio llevó a cabo la rectificación de los bordos del cauce, con lo que fueron atendidos 7.7 kilómetros y mantener un azolve constante para evitar acumulación de basura.
Expuso que hicieron estudios previos de manera formal para presentar estos datos a la Secretaría de Agua en un proyecto de saneamiento integral.
Estaremos teniendo ya reuniones, nosotros ya llevamos avances de la mano con Conagua (Comisión Nacional del Agua) y Caem (Comisión del Agua del Estado de México) para dar inicio a lo que a lo que la secretaría y el gobierno federal establezca
Ana Muñiz Neyra
Reconoció que parte clave de estos trabajos de mejora será el reacondicionamiento de las plantas de tratamiento de agua, las cuales están en obsolescencia por la tecnología que utilizan, además de que muchas no funcionan.
Enfatizó que será clave el buen desarrollo de este plan integral federal, no sólo para el beneficio, como en su caso para San Mateo Atenco, sino toda la región que cruza el cauce.
Con 700 kilómetros de longitud, el río Lerma es el cauce fluvial interior más extenso de México. Su origen se encuentra en la laguna de Chignahuapan, al sur de Toluca, y atraviesa los estados de México, Michoacán, Querétaro, Guanajuato, Jalisco, y finalmente desemboca en la laguna de Chapala, también en Jalisco.
A pesar de su relevancia, es uno de los ríos más afectados por la contaminación, principalmente debido a la intensa actividad industrial en su cuenca.
Un informe de Greenpeace de 2014 reveló que las aguas del río Lerma presentaban altos niveles de metales pesados, como cadmio, plomo y cobalto.
Un estudio de la Conagua de 2018, centrado en la calidad del agua en la Región Hidrológica Lerma-Santiago-Pacífico, encontró que de los nueve puntos analizados en el tramo del río que cruza la ciudad de Salamanca, Guanajuato, todos mostraron contaminación por heces fecales, bacterias de E. coli y metales pesados.
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