La frase “El rock es la música que llegó para quedarse”, me llega como idea principal cuando percibo información sobre inteligencia artificial (IA), llegó a nuestras vidas, a nuestros trabajos, en nuestra empresa, incluso nuestras relaciones y forma de producir creativamente, pero ¿qué es la Inteligencia Artificial?
Una tecnología que revoluciona la forma de trabajar y de vivir, se refiere la capacidad de un sistema en realizar tareas en donde se requiere la inteligencia humana, como aprendizaje, razonamiento, solución a problemas, es una gran roca que viene a romper y redefinir la forma de hacer o tomar decisiones
De la misma forma que la Primera Revolución Industrial transformó las formas de trabajo, al introducir la energía de vapor y mecanizar la producción, la Inteligencia Artificial está modificando sin duda la manera en que creamos y producimos.
De acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, hasta el 40 por ciento de los empleos en el mundo pueden se verán impactados por la introducción de esta tecnología, pero ese 40 por ciento corresponde también a los países y actividades donde se tiene una oferta laboral mucho más calificada, es decir, las tareas que pueden ser cubiertas por la IA, sin la intervención de las personas dejan abierta la oportunidad para que los trabajadores se enfoquen en actividades de mayor valor agregado.
Según la Edición 98 de la revista IMEF, la tendencia al uso de la IA, las implementaciones de herramientas de IA generativa en las compañías siguen siendo limitadas. Iván Palomera, Co-Founder de la Multinacional de Marketing Digital Smartup.MX considera que “no hay peor camino que el que no se recorre. La IA no hoy es opcional, es disruptiva, como fue la llegada de Internet o de la electricidad. Es mejor afrontar la situación y empezar a experimentar”.
En la medicina, la IA es utilizada para reforzar una investigación, una actualización o el análisis de alguna medicina o formula, en la generación de contenidos creativos es aplicada con regularidad y hasta en la argumentación de un caso penal, lo cierto es que aún no tenemos por completo sus alcances y lo correcto o seguro de su uso.
Bajo este supuesto la IA deberá ser una herramienta que cambiará las formas de hacer las cosas en la empresa y actividad diaria, necesitaremos nuevas capacidades en nuestra fuerza laboral, y debemos estar conscientes que la IA no quitara empleos, más bien, quedarán fuera quienes no quieran o puedan usarla.
El proceso de adopción de estas tecnologías para la empresa deberá seguir algunos pasos como definir políticas, estrategias, gestión y hacia dónde va así como analizar riesgos y beneficios; Hoy es momento de entrenarnos en su uso para hacer las tareas básicas y dejar más tiempo al análisis y pensamiento crítico.
El gran reto que conforma la llegada de esta herramienta, que sólo en el último año ha dejado ganancias por más de 96 mil millones de dólares debería apuntar a su comprensión, entrenamiento y desarrollo ético por todas las capas sociales y entender que la IA no tiene criterios propios ni razonamiento, eso lo hacen las personas y el ahí es donde está el verdadero peligro.
Una programación con valores inadecuados o un uso con fines nocivos para la propia especie puede estar avecinándose como el gran peligro que tendremos que enfrentar y en donde si tenemos que estar muy alertas.
En 1885 Karl Benz nos empujó al reto y oportunidad de cambiar la carreta por un vehículo a motor, es posible que estemos dando el siguiente paso para que este caballo jale con más velocidad y hacia un destino de gran valor…nos leemos la siguiente.