La apertura de dos nuevas guarderías del IMSS en Toluca y Calimaya, anunciada por Onatihu Ortiz Castillo, titular del IMSS Estado de México Poniente, es una medida positiva para apoyar a las personas trabajadoras aseguradas, especialmente en un contexto donde el acceso a estancias infantiles sigue siendo un reto. Sin embargo, el número de espacios continúa siendo limitado en comparación con la demanda creciente. Con solo 35 guarderías en operación y una capacidad de cinco mil niños, es necesario que el IMSS refuerce su infraestructura y amplíe el alcance de este servicio para garantizar que más familias puedan beneficiarse de él sin enfrentar largas listas de espera. Además, el hecho de que estas nuevas sedes sean de tipo participativo implica que su calidad y supervisión deben ser una prioridad. Ortiz Castillo debe asegurar que existan mecanismos de control efectivos para garantizar que las condiciones en estas guarderías cumplan con los estándares de seguridad, alimentación y desarrollo infantil.
Apoyos para policías
El incremento salarial del 20% para los policías de escala básica en Metepec, anunciado por el alcalde Fernando Flores, dignifica la labor de los elementos de seguridad. Con un salario cercano a los 12 mil pesos, esta mejora representa un reconocimiento al esfuerzo de quienes enfrentan diariamente riesgos para proteger a la ciudadanía. Sin embargo, el verdadero impacto de esta medida dependerá de si viene acompañada de mejores condiciones laborales, capacitación y equipamiento, factores esenciales para fortalecer la seguridad pública en el municipio. Más allá del anuncio, es fundamental que este incremento no sea solo un logro aislado, sino el inicio de una política sostenida de apoyo a los cuerpos policiacos. El reto para Flores será garantizar que esta inversión en los policías se traduzca en un mejor desempeño y en una reducción efectiva de los índices delictivos en Metepec.
Una más de Raymundo Martínez
El hallazgo de la Auditoría Superior de la Federación sobre la compra de cámaras de videovigilancia en Toluca durante la gestión de Raymundo Martínez Carbajal revela una grave falla en el uso de recursos públicos. Gastar 42.5 millones de pesos en equipos que no fueron instalados o no operaron adecuadamente no solo es un ejemplo de ineficiencia, sino que también pone en duda el compromiso real de la administración pasada con la seguridad ciudadana. En un contexto donde la delincuencia es una de las principales preocupaciones, desperdiciar fondos destinados a la vigilancia es inaceptable. Más allá de señalar estas irregularidades, es fundamental que haya consecuencias claras. No basta con identificar las inconsistencias; la actual administración y las autoridades fiscalizadoras deben garantizar que los responsables enfrenten las sanciones correspondientes y que los recursos sean recuperados o reorientados adecuadamente.
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