La implementación de las reformas electorales en el Estado de México plantea un complejo reto logístico y presupuestal para el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM). A pesar de las limitaciones financieras que suelen acompañar estos procesos, la consejera presidenta Amalia Pulido Gómez ha subrayado que el organismo cuenta con la capacidad técnica y humana para llevar a cabo esta tarea con éxito. Sin embargo, la magnitud del proceso exige una coordinación precisa entre las distintas instituciones involucradas, así como una adecuada distribución de los recursos para garantizar la transparencia y la equidad en la selección de jueces y ministros, un proceso fundamental para fortalecer el estado de derecho. Aun cuando el IEEM ha transmitido confianza en su capacidad operativa, la realidad presupuestal no puede ser ignorada. La ejecución de una elección de esta naturaleza implica gastos significativos en capacitación, tecnología y supervisión, aspectos esenciales para evitar irregularidades.
Avances con retos
El Gobierno del Estado de México desplegó una estrategia ambiciosa para proteger a la población durante la Temporada Invernal 2024-2025, con la aplicación de 2 millones de vacunas contra la influenza estacional y el COVID-19. Este esfuerzo, coordinado por el Instituto de Salud del Estado de México (ISEM), ha movilizado recursos considerables, como brigadas en 700 localidades, equipos de radio comunicación y perifoneo. Macarena Montoya Olvera, Secretaria de Salud, enfatizó los logros de esta campaña, pero queda pendiente evaluar si la vacunación logrará realmente reducir las brechas de acceso entre sectores vulnerables. Además, la sostenibilidad de estas acciones dependerá de la capacidad del sistema de salud para mantener el suministro de vacunas y reforzar la confianza ciudadana frente a la desinformación. Resulta fundamental implementar mecanismos de seguimiento que garanticen no solo la cobertura numérica, sino un impacto efectivo en la disminución de esas enfermedades durante esta temporada.
Falta de comunicación
La disparidad en las cifras sobre incendios forestales entre Probosque, encabezado por Alejandro Sánchez, y la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR), liderada por Sergio Humberto Graf Montero, evidencia una preocupante falta de comunicación entre estas dependencias. En un contexto donde los incendios forestales son una amenaza recurrente y de alto impacto ambiental, esta descoordinación no solo genera confusión en la ciudadanía, sino que dificulta la formulación de políticas públicas efectivas y el diseño de estrategias conjuntas de prevención y combate. La inconsistencia en los datos debilita la credibilidad institucional y plantea interrogantes sobre la capacidad de ambas entidades para abordar este desafío de manera unificada. Más allá de una simple discrepancia numérica, esta situación pone de manifiesto la necesidad urgente de establecer protocolos claros de colaboración y comunicación entre ambas dependencias.
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