Luego de varios meses de afectaciones graves y años de sequía, autoridades de los tres niveles de gobierno han podido respirar tranquilos gracias a la recuperación de las presas del Cutzamala. Sin embargo, el sistema en su conjunto está apenas al 63.93%, lo que significa que la estabilidad de la dotación de agua estará en nuevo riesgo en la temporada de sequía.

A finales de abril de 2024, registraba un almacenamiento total de solo 31.5%, una situación grave para la disponibilidad de agua en la Ciudad de México y el Estado de México, que llevó a cerrar la llave en espera de las lluvias.

Hoy, todos parecen dejar de lado la sequía, pero en realidad es urgente encontrar alternativas de suministro y una mayor eficiencia en el uso del agua para prevenir un colapso total en el futuro cercano.

Este sistema abastece a Ecatepec, Naucalpan, Tlalnepantla, Cuautitlán Izcalli, Huixquilucan, Nezahualcóyotl, Atizapán de Zaragoza, Tecámac, y Toluca.

En la capital mexiquense, por ejemplo, la crisis persiste y en las colonias céntricas los habitantes no logran sobreponerse al tandeo, en buena medida porque las autoridades municipales fueron del todo incapaces para organizarse y comunicarse. Nunca consiguieron establecer un calendario de cortes de servicio para que los vecinos pudieran tomar previsiones, mientras que hay colonias que llevan meses sin una gota en la llave.

Además, servicios como las pipas particulares y los trabajadores que construyen cisternas, colocan tinacos e instalan sistemas más sofisticados para asegurar que haya agua en las llaves, han sido los grandes ganadores.

Este sistema es fundamental para la región, ya que proporciona alrededor de un tercio del agua potable consumida por millones de personas. Qué pasa si la crisis nos lleva al punto de perder ese suministro, tesis cada vez más posible y cercana, pero no tenemos un plan en firme.

Mientras, la demanda de agua en el Valle de México sigue en aumento. Simplemente, el funcionamiento del Tren Suburbano Toluca-Ciudad de México generará un crecimiento tremendo en la demanda.

El gobierno del Estado ha implementado algunas medidas, como el programa de reparación de fugas, dado que hasta el 46% se pierde en ellas.

También han promovido con bastante entusiasmo el reciclaje, la captación de agua de lluvia y la habilitación de decenas de plantas tratadoras que los municipios tienen abandonadas.

Además, existen propuestas para construir nuevas presas, como la de Temascaltepec, o expandir el Sistema Lerma.

Al final de cuentas, es urgente encontrar soluciones de fondo, tomar en serio el problema, como una prioridad y concientizar a los ciudadanos, este no es solo un problema gubernamental. El tiempo se acaba y es momento de poner manos a la obra, porque la crisis es ahora.

La última trinchera

Los normalistas de Tenería tienen tomado el centro de Toluca ya hace varios días con manifestaciones y en huelga de hambre por un asunto añejo pero que ahora roba reflectores.

Para colmo, mientras el secretario General de Gobierno, Horacio Disrte, asegura que avanzan las negociaciones, los estudiantes dicen que no han tenido ningún acercamiento con él.

Peligroso, los chicos tienen amplia experiencia en estas movilizaciones y poco que perder.

Google News

TEMAS RELACIONADOS