Tepotzotlán, Mex. Cuenta la leyenda del Tigre de Santiago que por allá entre los años 1950 y 1960 don José se subía a la Sierra de Tepotzotlán con su escopeta a dispararle a la gente que veía para matarlos, solo por puro gusto. Así nada más, sin mediar palabra alguna. Hasta que una persona del pueblo de Santiago Cuautlalpan se armó de valor y comenzó a estudiar los movimientos, llevando a bendecir las balas que usó para cobrar venganza, engañando al padre de la iglesia para que lo hiciera, contó Martha, habitante de Tepotzotlán.

La gente de la comunidad sigue contando en estas fechas la historia del señor que mataba por gusto y que terminó siendo cazado por un hombre, de identidad aún desconocida, dejando una cruz en algún rincón del cerro del jorobado. “Se dice que se escondía entre los nopales para poder disparar al tigre. Cuando lo ve cerca, le dispara pero solamente le tira el sombrero, le vuelve a apuntar y le da en el pecho. Y al final, se acerca temblorosamente y le da entre ceja, jefa y oreja y le da un tiro en la frente para matar al Tigre de Santiago”.

Su manera de contar las narraciones no es para causar miedo entre el público, más bien es para que disfruten de una manera original y divertida de estas historias. Foto Arturo Contreras
Su manera de contar las narraciones no es para causar miedo entre el público, más bien es para que disfruten de una manera original y divertida de estas historias. Foto Arturo Contreras

Hasta la fecha no se sabe quién lo mató o simplemente entre la gente de Santiago Cuautlalpan nadie quiso decir quién lo hizo porque el señor, se dice, solo mataba por gusto. Y aún hay gente que se llega a organizar para subir a la sierra a visitar la cruz que le pusieron, manteniendo viva la leyenda.

Lee también

Martha y su hija Camila cuentan estas historias acompañadas de música; dos de Tepotzotlán y tres del país, como la de Aullido de los perros, la llorona zapoteca, tigre de Santiago Cuautlalpan, la vela y la bruja, pasando tanto por la Sierra de Tepotzotlán en un recorrido que dura cinco horas o por el Atrio de Los Olivos, en el centro del Pueblo Mágico, construido en lo que fue un panteón y en donde aún se ven dos tumbas.

Cuenta la leyenda del Tigre de Santiago que por allá entre los años 1950 y 1960 don José se subía a la Sierra de Tepotzotlán con su escopeta a dispararle a la gente que veía para matarlos, solo por puro gusto.


“El Día de Muertos es una de las tradiciones más bonitas, no solo aquí sino de todo México y particularmente en Tepotzotlán, la comunidad se ha hecho partícipe. Hay gente que hace el desfile monumental desde hace diez años. Las familias participan, hacen sus piezas de cartonería o ellos usan algún traje típico o algún disfraz y se suman al desfile. La tradición del Día de Muertos es algo muy especial para los que somos de Tepotzotlán”, contó Martha.

Los niños no deben llorar de noche porque pueden atraer a brujas y seres malignos, cuenta otra de las leyendas de Tepotzotlán que también se desarrolla en Santiago Cuautlalpan, donde se dice que Felipa tuvo que correr a tocar la puerta de la cabaña de Tomasa, la curandera del pueblo, para que le ayudará a alejar una gran bola de fuego que la perseguía.

Su manera tan particular de contar la leyenda es lo que atrae al público. Foto Arturo Contreras
Su manera tan particular de contar la leyenda es lo que atrae al público. Foto Arturo Contreras

“Lejos de ser un tema de terror, es un tema de tradición y como le agregamos ciertas cositas con las que la gente se ríe, pues se van contentos. Es rescatar la tradición y contar las leyendas de una manera diferente porque lo combinamos con el tema de la música, podemos encontrar recorridos de leyendas en muchos lugares, pero aquí te vas a divertir”, dijo.

Síguenos en nuestras redes sociales

Instagram: , Facebook: y X: .

Google News

TEMAS RELACIONADOS