Por Óscar Hernández
Toluca, Méx. La reciente recuperación del nivel de la presa Miguel Alemán ha traído un respiro para algunos sectores turísticos en Valle de Bravo, aunque los artesanos locales aún enfrentan dificultades para recuperar sus ventas.
Raúl Loyola, artesano de San Simón de la Laguna, ha pasado su vida creando figuras talladas en madera, como colibríes, corazones, flores o pulseras. Para él y muchos otros comerciantes de este pueblo mágico del Estado de México, la sequía y los bajos niveles del lago afectaron gravemente sus ingresos.
"Antes venía más gente y las ventas eran mejores. Ahora, aunque el lago ha subido, las ventas no son como antes, pero esperamos que mejoren para fin de año", expresó Raúl desde su improvisado puesto de artesanías.
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La artesanía es la única fuente de ingresos para Raúl y su familia, por lo que la disminución en el turismo pone en riesgo su estabilidad económica.
Otro caso es el de Gabriela González, vendedora mazahua originaria de Avándaro, y quien también enfrenta una situación similar. En un pequeño puesto en la banqueta, cerca de los muelles del lago de Valle, ofrece tejidos hechos a mano, y lucha por adaptarse a la baja en ventas.
La reciente crisis hídrica en este destino mexiquense ha llevado a varios artesanos y otros miembros de la comunidad, a buscar trabajos alternativos en talleres o tiendas de autoservicio, ya que la afluencia turística resulta insuficiente para mantener sus negocios.
Arturo Villalpando, propietario de una marina con más de 50 lanchas, también se vio afectado por la sequía. Durante casi ocho meses, los bajos niveles de la presa que rompieron récord histórico, impedían el uso de las embarcaciones, lo que le costó la pérdida de algunos clientes.
"Fue una temporada muy difícil, las lanchas simplemente no podían salir al agua porque tocaban el fondo y no flotaban", relató Villalpando. Pero las recientes lluvias han permitido reactivar sus actividades.
"Ahora podemos trabajar bien, los turistas están regresando y estamos recuperando a los clientes", añadió.
La relación entre el nivel del agua en la presa y la economía turística en Valle de Bravo es clara. Con la mejora en los niveles del lago, la comunidad confía en que la recuperación económica está en marcha, mientras esperan más lluvias para asegurar una temporada exitosa a finales de año.
De acuerdo con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), el manejo adecuado de las presas del Sistema Cutzamala ha permitido recuperar 287.73 millones de metros cúbicos de agua desde junio.
Citlalli Elizabeth Peraza Camacho, directora del Organismo de Cuenca Aguas del Valle de México, ha destacado que las tres presas principales —El Bosque, Miguel Alemán y Villa Victoria— han visto un aumento en sus niveles, pasando de un 57.4 por ciento el 23 de septiembre a un 62.9 por ciento al 7 de octubre.
En particular, Valle de Bravo continúa con la política de no extraer agua, inyectando hasta 12 metros cúbicos por segundo para acelerar su recuperación.
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A pesar de ser la presa con menor nivel, con un 52.6 por ciento de su capacidad, se espera que esta medida permita un repunte en los próximos meses.
Las presas El Bosque y Villa Victoria, por su parte, se encuentran al 88 por ciento y 56 por ciento, respectivamente.
Se pronostica que en las próximas semanas el volumen de las tres presas alcance los 510.3 millones de metros cúbicos, lo que permitiría estabilizar los servicios y continuar impulsando la economía de la región.
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