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Metepec. Mex. La Protectora de Bosques del Estado de México (Probosque) se declaró en estado de alerta máxima en materia de incendios desde el pasado 19 de diciembre.
De acuerdo con Alejandro Santiago Sánchez Vélez, director general de Probosque, las condiciones climáticas de sequedad de los terrenos y reportes de campo los obligaron a adelantar los trabajos preventivos, esto cuando en 2024 la alarma comenzó hasta finales del mes de febrero.
Este ciclo, advierte, los estudios climatológicos y reportes anticipan que será un periodo más complicado.
Convocamos a todos los delegados a todos nuestros comisariados ejidales a todos nuestros presidentes de bienes ejidales, a las asociaciones civiles, a los ambientalistas diciéndoles que tenemos mucho combustible, llovió y tenemos una prolongada sequía”.
Alejandro Santiago Sánchez Vélez
Refirió que luego de las heladas que se han registrado en las partes altas, el escenario comienza a complicarse por pastos y malezas secos, es decir factor de riesgo de fuego. Con ello, advierte que la aparición de incendios para este año será “altísima”.
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Detalló que durante la temporada de incendios forestales del ciclo pasado en el Estado de México se atendieron mil 205 eventos.
Estos siniestros generaron una afectación en 35 mil 440 hectáreas. De estas 32 mil corresponden a pastizales y arbustos, 2 mil 104 hectáreas a sembradíos de renuevo y hasta 478 hectáreas de arbolado adulto.
Los municipios con más incendios fueron Ocuilan con 102, Nicolás Romero con 70, Villa del Carbón con 69, Ixtapaluca con 65 y Valle de Bravo con 53. En tanto las demarcaciones con mayor afectación siniestrada fueron Temascaltepec con 3 mil 431 hectáreas, seguido de Jilotzingo con 2 mil 614, Luvianos con mil 893, Tejupilco con mil 710 e Ixtapaluca con 1589 hectáreas afectadas.
Recordó que los incendios aun teniendo todas las condiciones adversas para que se presentan derivan en más del 90% del factor humano.
No se provocan zonas hay una mano siempre una manos siempre mal intencionada o descuidada que los genera”.
Alejandro Santiago Sánchez Vélez
Con ello se ha iniciado el operativo preventivo, al momento las 37 las torres de observación se han puesto en acción operativa, vigilando cualquier punto de calor para detectar conatos o incendios.
Así mismo desde el 17 de septiembre emprendieron acciones de mejoramiento de caminos rurales para poder acceder de forma más rápida en caso de que fuera necesario además de la generación de brechas cortafuego en puntos susceptibles de siniestro, líneas negras, podas y chaponeo.
El riesgo que proyecta la autoridad es que, si no se suman todos los gobiernos municipales, y sociedad, en este 2025 podría repetirse la cifra de más de 1200 siniestros en bosques estatales.
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