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Toluca. Méx. En los últimos años un meme se ha convertido en tendencia para reírse de la desgracia económica para la generación de los denominados millennials, o como también se le llama los chavorucos, generación de trabajadores que nació entre los años 81 al 96, y que de acuerdo con especialistas inmobiliarios son aquellos con menores posibilidades de hacerse dueños de una casa como lo hicieron sus padres o abuelos.
De acuerdo Fabiola Pérez, especialista inmobiliaria, este escenario adverso deriva de factores como el incremento del costo en el propio mercado, la concentración de los centros de trabajo, la disminución de las áreas de construcción, pero sobre todo los bajos salarios que reciben.
Explica que a este escenario se suma la carencia de vivienda social en el país; es decir accesible para los trabajadores jóvenes.
La pandemia de COVID-19 cambió en un inicio la mentalidad de los trabajadores de esa generación, quienes no se mostraban interesados por hacerse de un inmueble que los “atara” a un sitio por mucho tiempo, pues buscaban vivir el mayor número de “experiencias”.
Sin embargo, una vez superada la situación de salud existe el deseo de hacerse de un patrimonio, pero las condiciones no son las optimistas.
No es lo mismo que estes joven y digas yo quiero tener una casa en renta que ya tengas una familia, un esposo una esposa y digas tengo que buscarles un futuro porque no sé qué va a pasar conmigo en la vejez eso lo entendieron hasta que llegaron a esta edad
afirmó Fabiola Pérez
El problema es que no tienen las condiciones económicas y salariales para dar respuesta a los precios que exige el actual mercado inmobiliario.
Argumenta que en el Estado de México la vivienda más accesible que se tiene en este momento es de 780 mil pesos con una extensión de 50 a 55 metros cuadrados, y son sólo departamentos, pues ya no hay casas debajo de un millón de pesos.
Con ello, este sector tiene que recurrir a las rentas grupales entre compañeros de trabajo o amigos para hacerse de una casa; sin embargo, esto sólo puede considerarse temporal.
Señaló que si se quiere romper esta tendencia será clave que se cumpla el proyecto de vivienda social que ha anunciado la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, donde se anuncia la construcción de hasta un millón de viviendas sociales que habrán de reactivar el mercado y disminuir los actuales costos.
Que el gobierno nuevamente vuelva a construir vivienda esto tiene hace muchos años que dejó de suceder realmente el gobierno es el único que puede construir ese tipo de vivienda porque como la tierra está muy cara todos los insumos son elevados, el acero es carísimo sumado a los trámites burocráticos para poder generar un desarrollo son muy caros sólo el gobierno puede hacer esto Claudia tiene esa intención de generar vivienda.
La especialista advirtió que, si el gobierno no incide en esta situación de generar vivienda, habrá mucha gente que no va a tener casa, no solo hoy sino en el futuro, cuando este sector de trabajadores llegue a la vejez, y ya no pueda pagar una renta será una grave problemática social.
“Ahorita los padres, abuelos, bisabuelos tienen una casa y aunque no trabajen tienen donde estar porque compraron cuando el gobierno generaba vivienda. El problema será después ¿dónde vivirán los jóvenes de hoy que no tengan casa?”, advirtió.
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